Miguel Ourvantzoff: Un ilustrador ruso en España. Los álbumes de la Biblioteca Hispánica
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María Blanco Conde es conservadora de la colección artística de la AECID. Doctoranda en Hª del Arte Contemporáneo por la Universidad Complutense de Madrid. Experta con larga experiencia en mercado del arte en España. Profesora del programa ACERCA de la AECID y en el Máster en Tasación de Obras de Arte en la Universidad Antonio de Nebrija en Madrid. Autora de libros de arte como Catálogo de la Colección Artística de la AECID; Lago Rivera, Julián de la Herrería: su obra. Colección Museo Julián de la Herrería; Entre dioses y hombres: Julián de la Herrería, etc. Comisaria, crítica de arte en prensa y autora de artículos de investigación en revistas especializadas de arte.
1ª Parte. Series Sudamericanas, madrileñas e históricas (1949-1970)
En la Biblioteca del antiguo Instituto de Cultura Hispánica (ICH), hoy AECID, se conservan doscientos treinta álbumes que contienen más de cuatro mil ilustraciones del prolífico artista de origen ruso Miguel Ourvantzoff Zibicheff (San Petersburgo, 1897-Madrid, 1980) y ninguna pista en el Archivo de cómo llegaron hasta allí, sólo una consigna: “Encargo de la Biblioteca Hispánica”.
A mediados del siglo XX encontrar un ruso viviendo en Madrid era algo más que exótico, una rareza. Además, Ourvantzoff contó con el apoyo de destacados intelectuales que prologaron sus cuadernos gráficos, lo cual suponía toda una proeza y más aún, cuando su biografía superaba sus méritos con los pinceles.
Hijo de León Ourvantzoff, pintor y dramaturgo, miembro del gobierno del zar Nicolás II había recibido una educación artística y militar. Más adelante, como superviviente de la revolución bolchevique tuvo que huir de Rusia recorriendo buena parte de Europa y desembarcó en Buenos Aires en 1928. Allí escribe obras teatrales y expone sus acuarelas y grabados por América del Sur donde realiza sus primeros Apuntes Sudamericanos hasta finales de la década de los cuarenta. Este ilustrador se instaló en España en 1951 hasta su muerte en Madrid el 24 de septiembre de 1980 y encontró su principal apoyo para editar sus cuadernos en el Instituto de Cultura Hispánica y su fuente de inspiración en la historia de España.
La colección de álbumes de Ourvantzoff de la Biblioteca Hispánica de la AECID, es la más completa de todas aquellas que encuentran en Madrid, superando incluso a la de la Biblioteca Nacional de España. En un reciente artículo de Mónica Vázquez Astorga afirmaba que los álbumes que se conservan en la BNE era la más grande de Madrid.
La investigación sobre la colección Ourvantzoff, adquirida por el ICH[A], comenzó en 2008. Por entonces, se procedió a inventariar, catalogar y fotografiar todas las ilustraciones de estos cuadernos. Existen al menos dos ejemplares de cada título y tienen en común su formato y la tipografía manuscrita. Además, siempre presenta una ilustración en la cubierta y otra en la contraportada. Cada lámina está identificada con anotaciones personales sobre papel cartulina de color cremoso firmando con las siglas “M.O” o “M. OURV.” En la cubierta, en el margen central inferior, aparece su nombre seguido del apellido: ‘MiguelOurvantzoff’ a lápiz.
Antes de 2008 estas carpetas permanecían inéditas y ocupando varias baldas en las estanterías de uno de los depósitos de la Biblioteca. Dicha colección de álbumes gráficos está clasificada por series y fechada entre 1949 y 1975. Coincide con la creación de varias revistas importantes en el Instituto de Cultura Hispánica: Cuadernos Hispanoamericanos, El Correo Literario y Mundo Hispánico pero en las que, sin embargo, apenas colaboró como ilustrador.
Se respetó el orden cronológico para inventariarlos. La serie más antigua es fruto de sus viajes por América del Sur comenzando por Argentina.
Al margen de la serie Apuntes Sudamericanos, se conservan otros cuadernos fechados en 1949 con dibujos originales sobre: la Semana Santa de Puno; Arequipa; Cuzco; Potosí y La Paz.
En 1951, una vez instalado en Madrid comenzó a publicarlos gracias al ICH [B] y por la falta de expedientes en el Archivo, desconocemos quién le pudo presentar al director de la Biblioteca Hispánica, José Ibáñez Cerdá (1949-1981) con el que debió mantener, sin duda, un estrecho contacto.
Tratándose de dibujos originales se realizaron en tiradas muy cortas bajo el título: Apuntes Sudamericanos distribuidos en once cuadernos. Cada ejemplar cuenta con justificación de tirada, índice de artículos e ilustraciones distribuidas en pliegos.
Los ejemplares del ICH están fechados en 1949 aunque fueron publicados entre 1966 y 1967. Ilustraciones realizadas del natural de tipos populares y paisajes urbanos en varias técnicas: acuarelas, litografías, punta seca. La más antigua y en un mismo álbum contiene cuarenta láminas (acuarelas, dibujo a lápiz y litografías) titulada: Apuntes del Altiplano, norte argentino y Bolivia.
Cuenta con un extenso prólogo escrito por el propio autor y que resulta como un cuaderno de bitácora con viñetas repletas de personajes que retrató, resultando muy interesantes las descripciones de sus habitantes, su lengua, sus costumbres y comprobamos que llega a acarrearle a veces algún problema pues llegan a confundirle con un espía (en agosto de 1969 Ourvantzoff publicaría un artículo en la revista Mundo Hispánico titulado: ‘El Tíbet Americano’.nº 257, agosto 1969, p. 12, relatando esta experiencia de sus viajes por estos lugares, ilustrado con fotografías en blanco y negro). Antecedente de los álbumes siguientes titulados: Apuntes Sudamericanos publicados por el ICH, el cuaderno primero fue prologado por el Marqués de Lozoya quien, tras una pequeña biografía del autor, oriundo de Kazan, destacaba que era el pintor de los castillos españoles.
Desde su llegada a España desarrolló toda una colección de temas colombinos como un infatigable divulgador y conocedor de nuestra historia. Sus álbumes se imprimieron en Gráficas Amara (Madrid) y en las que, insistimos, el Instituto de Cultura Hispánica jugó sin duda un importante papel como mecenas y promotor, buscando en cada cuaderno un prologuista de renombre: Joaquín Entrambasaguas; José Díaz y Díaz; José Prados López; Eduardo de Palacio; Gregorio Marañón; Guillermo Gustavino, entre otros.
Sus inquietudes hacia el arte y la arqueología le llevaron a fundar un museo que lleva su nombre en Alarcón (Cuenca) en el antiguo palacio de los Castañeda que fue inaugurado el 30 de octubre de 1955.
En 1963 publicó con el ICH: Apuntes Peruanos, álbum con cuarenta láminas de las cuales veinticinco son litografías, punta seca y dibujos, con un prólogo firmado por el director del organismo Gregorio Marañón Moya (Madrid, 1915-2002) escritor, diplomático y jurista quien el año anterior también había prologado el libro: Diario de Colón, otro asunto muy relacionado con la temática de Ourvantzoff.
Entre 1956-1958 se publicaron otros álbumes con litografías dedicados a localidades próximas a la capital que el autor recorrió y convirtió en carpetas: San Martín de Valdeiglesias; Alcalá de Henares; Torrelaguna; Belmonte o Rincones de Madrid.
La segunda gran serie titulada: Apuntes Madrileños (1964-1968) está formada por veinte cuadernos, dedicada a la vida cotidiana de la capital, de los cuales en la Biblioteca Hispánica tiene los primeros dieciséis. Pintados sobre cartulina o sobre papel, ilustrados con dibujos o grabados (litografía, punta seca). La experiencia no es nueva ya que en 1958 había publicado estampas sobre la ciudad bajo el título: Rincones de Madrid.
Los dibujos están realizados a lápiz grafito, rotuladores, acuarela y toques de gouache, además se encontraron fuera de la Biblioteca algunos dibujos sueltos dedicados al Paseo del Prado o al Casón del Buen Retiro.
En esta serie, las introducciones están firmadas por Eugenio Lostau Román, en ese momento presidente de la Diputación Provincial de Madrid, Joaquín de Entrambasaguas, catedrático de literatura en la Facultad de Filosofía y Letras de Madrid.
En tres de estos Apuntes recurre a un alter ego (Eusebio Rodríguez) que vivía en una buhardilla de la calle Velázquez nº 118, quizás su primera residencia ya que como señalaba en su artículo, Mónica Vázquez, el artista en 1970 se alojaba en el número 62 de la calle Palma.
Cada álbum contiene 21 dibujos (333 x 256 mm) o litografías (334 x 268 mm). Consta de índice y justificación de tirada. Las Litografías fueron realizadas en el taller de Ignacio Díez y fueron publicadas gracias al ICH a partir del mes de febrero de 1964, presentan un Madrid bullicioso y alegre por el que pasean sus habitantes.
En 1969 se realizó una exposición en la BNE, exponiendo sus libros ilustrados (‘Miguel Ourvantzoff pintor ruso de España y América’. Rev. Mundo Hispánico, nº 253, abril, 1969, p. 48) y también los ‘Castillos de España’ pintados a la acuarela, de los cuales hay nueve de ellos en la colección AECID, fechados entre 1965 y 1966. Se trataba de un encargo de la Sociedad de Amigos de los Castillos y la muestra fue patrocinada por el Instituto de Cultura Hispánica y para ello recorrió todos estos lugares tomando apuntes del natural (Ortiz Muñoz, L. ‘Desde los castillos clama la trova de la raza’. Rev. Mundo Hispánico, nº 85, abril, 1955, p. 38 y ss. Artículo ilustrado a color con acuarelas de castillos de Miguel Ourvantzoff).
La tercera serie comenzó en 1968 y durante dos años se dedicó a explorar Lugares Históricos. Divididos en veinticinco cuadernos están dedicados a los Reyes Católicos, Colón, y otros conquistadores, también a los enclaves españoles más importantes del descubrimiento de América (Ávila, Huelva, La Rábida), temas que encajaban a la perfección con el espíritu divulgativo del ICH y la política de la hispanidad.
Según el Marqués de Lozoya, el pintor pretende evocar con sus pinceles las gestas heroicas de los inicios la Edad Moderna. Comprobamos que ha tomado como referencia a pintores como Eduardo Cano, Ricardo Balaca, Muñoz Degrain, entre otros, para realizar sus estampas. Como en anteriores series, los cuadernos incluyen un índice en el que se indica a qué está dedicada cada litografía, algunas de ellas iluminadas a mano.
[A]
En el verso de la portada de los álbumes indica en la mayoría: ‘Pedido’ seguido de numeración a lápiz.
[B]
Con carácter autobiográfico fueron realizados en 1949 y publicados en enero de 1966 según consta manuscrito por el artista en el II Cuaderno. Atravesando el Altiplano. Los artículos están escritos en primera persona.
*Fotografías facilitadas por María Blanco Conde.
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OpenEdition le sugiere que cite este post de la siguiente manera:
mariablanco (15 de julio de 2024). Miguel Ourvantzoff: Un ilustrador ruso en España. Los álbumes de la Biblioteca Hispánica. La reina de los mares. Recuperado 9 de diciembre de 2024 de https://doi.org/10.58079/120l2
